jueves, 15 de octubre de 2009

Por un pasito

Definitivamente fue una final, en un partido en donde la polémica fue la estrella del encuentro y con un Gabriel Brazenas, que cometió demasiados errores arbítrales que influyeron en el normal desarrollo del encuentro, Vélez y Huracán, protagonizaron uno de las finales más emocionantes de los últimos años.

¿Por qué? Porque tuvo de todo, penales y goles no cobrados, suspensión por granizo y hasta invasión de cancha sobre el final. Fue un encuentro muy disputado, en donde Vélez se lo llevó por un gol que debió no cobrarse por una falta previa al arquero del Globo.
Pese a ser el conjunto más regular y sólido del Torneo Clausura 2009, haber perdido tan sólo un partido en todo el campeonato y de tener jugadores de selección como Nicolás Otamendi, el conjunto dirigido por Ricardo Gareca no mereció llevarse la victoria. Huracán batalló hasta las últimas consecuencias y debido al gran juego colectivo que desplegó a lo largo de la competición mereció ser el campeón.

De la mano de sus tres pilares Matías Defederico, Javier Pastore y Mario Bolatti desarrollo una manera de jugar, tocar el balón y de disfrutar el fútbol comparado a aquel equipo campeón del metropolitano de 1973.

Ahora, era necesario que el conjunto dirigido por Ángel Cappa desplegara el sistema de juego que venia desarrollando, pero en ésta final no lo pudo concretar y por una decisión desacertada del juez Brazenas, el Globo se quedo sin el titulo tan deseado y de coronar una campaña exitosa. El Huracán versión 2009 perdurará en la memoria de los hinchas quemeros por un largo tiempo por su juego vistoso y su hambre de gloria.